Paul Schrader, 2022
Viene muy al pelo con la reciente publicación del libro de Quentin Tarantino y la cantidad de conjeturas y especulaciones que le dedica a Paul Schrader. En este caso su fijación, más que en un regreso a Taxi Driver, parece estar (nunca dejó de estar) en Más corazón que odio. Ya es explícito desde el principio en la manera que Sigourney, en vocablo de western, se refiere a la sobrina: she is mixed race.
El pasado de Narvel está pegado en su cuerpo y lo lleva como la versión invertida de un trofeo, como un castigo tatuado. Este hombre, de esos que son peligrosos por convivir demasiado en soledad con sus propios pensamientos, será capaz de llegar caminando al porche, luego de recuperar a la chica de raza mezclada, pero con una diferencia, este no será un hogar que prescinda de él.
Hablando de ese final, el porche como idea es importante, desde el principio, hasta nos muestran que hay un lindo perro que Sigourney bautizó así. Si Schrader los hubiera hecho entrar a la casa la referencia sería muy notable, tan notable que la haría poco efectiva. Parece haber preferido lo que vemos, a la pareja consolidando su baile, yendo y viniendo por el porche, enamorados. Así es como saca de ese cuerpo plagado de esvásticas una historia de amor.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario